La norma ISO 9001 es un estándar internacional que establece los requisitos para un sistema de gestión de calidad (SGC) efectivo. Fue desarrollada por la Organización Internacional de Normalización (ISO) con el objetivo de proporcionar un marco común para que las organizaciones, de cualquier tamaño o sector, puedan implementar un sistema de gestión de calidad eficaz.
Algunos de los principios clave de la norma ISO 9001 incluyen:
Enfoque en el Cliente: La organización debe entender y cumplir con los requisitos y expectativas del cliente.
Liderazgo: Los líderes de la organización deben establecer una visión clara y crear un ambiente que fomente el compromiso y la participación del personal.
Compromiso de las Personas: El personal a todos los niveles debe estar comprometido con los objetivos de la calidad de la organización.
Enfoque basado en Procesos: La gestión debe entender y gestionar los procesos interrelacionados como un sistema para alcanzar los objetivos de la organización.
Mejora Continua: La organización debe buscar continuamente oportunidades para mejorar la eficacia de su sistema de gestión de calidad.
Toma de Decisiones Basada en la Evidencia: Las decisiones deben basarse en el análisis de datos y la información.
La norma ISO 9001 es aplicable a cualquier tipo de organización, ya sea del sector público o privado, y sin importar su tamaño o el producto/servicio que ofrezca. Al obtener la certificación ISO 9001, una organización demuestra su compromiso con la calidad y la mejora continua, lo que puede aumentar la confianza de los clientes y mejorar la eficiencia interna.